MIAMI 23 DE SEPTIEMBRE DE 2020, —La legislación propuesta por el gobernador Ron DeSantis dirigida a manifestantes violentos y el movimiento “Defund the Police” recibió atención nacional y el apoyo de la mayoría de los Floridanos.
El plan del Gobernador, prohibiría las subvenciones estatales y la ayuda a los gobiernos locales que recorten los presupuestos a los departamentos de policías.
Otras disposiciones crearían nuevos delitos y aumentarían las sanciones por acciones violentas contra agentes de policía y transeúntes.
“Cualquier municipio que recorte fondos a la policía, es sólo una política descabellada, es como cortarte la nariz para reparar la cara, entonces si le quita fondos a la policía, el gobierno estatal te los recortara también”, dijo DeSantis, añadiendo, “no te enviaremos dinero si estás haciendo cosas así”.
Por su parte la reacción de los revoltosos n o se hizo esperar, Lakey Love, del Comité de Acción Comunitaria Pro-Black Lives Matter de Tallahassee, dijo que la legislación propuesta crearía un estado policial.
Pero esas afirmaciones del miembro de BLM, provocó una carcajada del Gobernador DeSantis, quien respondió.
“¿Crees que está bien tirar un ladrillo a un oficial de policía? ¿Crees que está bien quemar edificios?” DeSantis preguntó.
Está claro que el gobernador de Florida no aceptará lo que ocurrió con el alcalde de Minneapolis, que hizo que la policía se retirara y dimitiera de su responsabilidad, dejando finalmente que los manifestantes que “se apoderaran de las calles”.
El Gobernador elogió a los alcaldes en Florida por cómo manejaron protestas violentas, y repitió que las ciudades y condados podrían enfrentar consecuencias bajo el proyecto de ley propuesto
“Si eso sucede en Florida, estamos renunciando a la inmunidad soberana”, dijo DeSantis. “Puedes demandar al gobierno local por daños y perjuicios por cualquier cosa que te suceda.”
Del mismo modo, DeSantis criticó cómo se manejaron las protestas en Portland.
“Lo que pasa en Oregón, los detienes, y luego vuelven a la calle haciendo lo mismo. ¿es eso diferente?” DeSantis preguntó.
Ciertas acciones violentas en las protestas podrían atraer delitos graves bajo el proyecto de ley propuesto. El daño a la propiedad o las lesiones a las personas por parte de un grupo de manifestantes violentos sería un delito grave de tercer grado, al igual que obstruiría el tráfico durante una protesta violenta o no autorizada.
“¿Realmente queremos seguir jugando a golpear y no tener resultados?” DeSantis añadido. “Una vez que alguien le lanza un ladrillo a un oficial de policía durante una de estas manifestaciones, tienen que ir inmediatamente a la cárcel, si se salen con la suya, lo seguirán haciendo”.
Destruir la propiedad pública, incluidos los monumentos, sería un delito grave en segundo grado en virtud de la propuesta. Participar en una asamblea violenta o desordenada para hostigar o intimidar a una persona en un alojamiento público, como un restaurante, sería un delito de primer grado.
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