• Dicen que quizás la nueva emisora traiga intereses escondidos
MIAMI, 18 DE JULIO DE 2012, NHR.com—En NHR.com no somos ajenos al disgusto que existe en la calle debido a la maniobra de Univisión Radio modificando las estaciones de radio WQBA y Radio Mambí.
La conversion de “La Cubanísima” en “Univisión América” es lo que más irrita y no es precisamente por el nuevo nombre, sino por cierto contenido con el que ahora carga la que era tan popular emisora de Miami.
Son innumerables los correos electrónicos que hemos recibido en NHR.com en los últimos días, y según fuentes dentro de Univisión América, son centenares las llamadas que inundan la pizarra de ambas emisoras, quejándose sobre todo de la programación de la nueva Univisión América.
Fuentes contactadas dentro de esa emisora le han dicho a NHR.com que son muchas las quejas de oyentes que no resisten la programación, sobre todo un programa que conduce un llamado Fernando Espuelas, en el horario de 3 a 4 de la tarde.
De Espuelas dicen que no es nada objetivo en sus comentarios y que siempre está listo para cortar a todo el que llame para decir algo favorable a Mitt Romney o para criticar al gobierno actual.
En uno de los últimos correos se comenta cómo un oyente de Nueva York le explica a Espuelas que cree que Romney debía entregar todas sus declaraciones de impuestos, porque eso seria transparencia. Esto hizo que Espuelas dialogara feliz con el que llamaba, pero acto seguido, el newyorkino le preguntó que si no creía que la transparencia debería tembién ser practicada por el presidente Obama, entregando todos los documentos que le ha solicitado el Congreso en el caso “Fast and Furius”. Esto hizo que el comentarista reaccionara cortando la llamada del oyente, mientras le respondía que lo que estaba haciendo el comité que investiga la venta ilegal de armas a los narcotraficantes mejicanos era politiquería.
Un observador que sigue de cerca el desarrollo del cambio en las dos emisoras ha indicado que al parecer la que era trinchera de lucha y defensa de la democracia va pisando terreno movedizo. Esto, según el observador, “pone en manifiesto que los ejecutivos de Univisión están, no solo de espaldas al concepto que deberían mantener en alto, sino que además no son capaces de reconocer que la nueva emisora no corresponde para nada a los intereses de la audiencia miamense, a no ser que haya una intención escondida”.