MIAMI 30 DE ABRIL 2025, NHR.COM—En su última critica al gobernador Ron DeSantis, el presidente de la Cámara de Representantes, Danny Pérez, anunció el martes la creación de un comité especial para planificar la reducción de los impuestos a la propiedad.
El sorpresivo anuncio de Pérez, realizado minutos antes del inicio de la sesión plenaria, se suma a la creciente cantidad de propuestas de recortes de impuestos, enfrentadas entre sí, sugeridas por DeSantis, el Senado y la Cámara de Representantes.
Pérez afirmó que el nuevo comité trabajará durante el verano para considerar cinco ideas de recortes de impuestos a la propiedad.
De acuerdo con fuentes en Tallahassee, el plan de DeSantis de otorgar reembolsos de $1,000 a los propietarios de viviendas carece de detalles específicos.
Pero Perez explico que, “Hace varios meses, DeSantis presentó la emocionante y provocadora idea de abolir los impuestos a la propiedad en Florida”, comentó el republicano de Miami, señalando que muchos se preguntaban cómo se lograría sin paralizar a los gobiernos locales ni desfinanciar a las escuelas y los departamentos de policía. “Desafortunadamente, con el paso de las semanas, el gobernador aún no ha presentado una respuesta específica a esas preguntas ni ha incluido el texto del proyecto de ley”, añadió Pérez.
La revelación de Pérez sobre el recorte de impuestos se dio a conocer en las últimas semanas de una sesión tensa e inusual, sin una fecha límite a la vista.
El recién elegido presidente de la Cámara de Representantes se ha enfrentado con el gobernador durante todo el año, contribuyendo a cerrar la convocatoria de DeSantis para una sesión especial en enero y, más recientemente, investigando a fondo la organización benéfica de la Primera Dama por su manejo oculto de fondos que terminaron en un comité político anti-marihuana.
Pérez, DeSantis y el presidente del Senado, Ben Albritton, han presentado diversas propuestas de recortes de impuestos para combatir los exorbitantes costos inmobiliarios de Florida, aunque la falta de acuerdo parece haber obstaculizado la capacidad de los políticos conservadores para consensuar el presupuesto del próximo año, una convergencia que es poco probable que ocurra antes del último día programado, el 2 de mayo.